Como jugar con dinero sin arriesgar el propio

Dentro del mundo del póker son muchos los que piensan que es necesario aportar dinero para poder jugar, aunque sea solo por diversión. Esta falsa creencia se ha propagado durante mucho tiempo, entre otras cosas, por la falta de una mente que se hubiera encargado de decir a sus posibles jugadores que no se requiere ningún deposito a menos que verdaderamente quiera jugarse con dinero. Y es que no somos pocos los que empezamos desconfiando de las salas de póker online y sin embargo, después de haber tenido ocasión de probar aquellas que verdaderamente son gratuitas, nos hemos convertido después en miembros de pago, cada cual en la medida de sus posibilidades y gustos.



No obstante, para aquellos jugadores que no se atreven a dar el paso definitivo desde el juego por placer hasta el juego por dinero, son varias las comunidades de póker online en las que se han establecido torneos con premios en efectivo, denominados técnicamente como freerolls. Estos torneos, además de dar la oportunidad de jugar por placer sin tener que depositar cantidad alguna, aportan el incentivo que supone el poder conseguir algún dinero que luego podremos usar bien en las mesas de juego real o bien como pago de la admisión de algún otro torneo, ya sea un torneo normal o satélite. Suelen tener carácter diario y jugarse a unas horas y con unos premios ya determinados.



El principal elemento que diferencia a las distintas casas de póker, son los premios y su distribución. Así, en la pagina de PKR.com se llegan a jugar hasta cinco de estos torneos cada día con premios que van desde los 10 hasta los 50 dólares, distribuidos entre los 80 mejores jugadores. Otras paginas prefieren concentrar el importe de esos premios entre los diez, los cinco o los tres mejores jugadores del torneo. O incluso el ganar un freeroll puede suponer “únicamente” el pasaporte a un torneo plagado de premios mayores como ocurre en PokerStars.com.



El único punto negro de estos torneos es la forma en que se desarrollan. Y es que dada la gratuidad de los mismos es frecuente que muchos jugadores adopten actitudes de riesgo extremo que en nada benefician a la marcha del propio torneo. Bien es cierto que muchos de estos “leopardos” se quedan asfixiados a mitad de camino, cuando después de jugárselo todo alguien les da con las cartas en todo el bolsillo, pero cuando alguno de ellos engorda su cuenta aprovecha para seguir con esa misma técnica, desvirtuando lo que seria el desarrollo normal del juego en una mesa de póker. A pesar de todo, los freerolls son el mejor sistema para familiarizarse con el emocionante mundo del póker con dinero.